Momentos históricos (1): Suzuka 1989-1990

La Formula 1 tiene momentos que todo buen aficionado debería conocer, uno de ellos es el final del campeonato de 1989, pero pongamonos en situación, el año anterior Senna habia ganado el título en su primera temporada en McLaren, y su compañero Alain Prost habia sido batido por el recien llegado.
Al año siguiente se repitió la historia, los dos pilotos de McLaren compañeros aunque solo de nombre, llegaron muy igualados a la penúltima carrera que se disputaría en Suzuka, Ayrton necesitaba la victoria si quería seguir teniendo opciones al titulo, mientras Prost tenia el titulo casi en el bolsillo, el francés califico muy mal, pero a lo largo de la carrera consiguió colocarse en la primera posición, lo que le daba el título matemáticamente, pero Senna no iba a ponerselo facil y a falta de 10 vueltas para el final se situó justo detrás de su compañero, en la frenada de la curva Casio el brasileño intento colarse por el interior en una maniobra desesperada, el resultado era inevitable, se tocaron y los dos quedaron fuera de carrera aparentemente, Prost salió de su coche pensando en el título, pero el McLaren de Senna, con la ayuda de los comisarios, logró reemprender la marcha y pese a tener que pasar por boxes a cambar el alerón dañado remontó al Benetton de Naninni, que pasaba por alli y consiguió la victoria, poco le duró la alegría ya que fue descalificado por haber provocado el incidente con su compañero, el resultado fue el tercero de sus cuatro títulos para el francés.


En 1990 llegaron a Suzuka en similares circunstancias, salvo que esta vez Prost iba en un Ferrari y que era a Senna a quien le valía que su ex compañero no finalizase la prueba, la carrera duró lo que tardó el brasileño en estampar su McLaren contra el coche rojo de Prost, fin de la historia, senna se habia tomado venganza del año anterior.



A lo largo de la historia son pocas las veces en las que dos grandes de un deporte coinciden en una misma época, Roger Ferderer no sería lo que es si no fuera porque Rafa Nadal le hace frente, el uno sin el otro no podrían regalarnos partidos increibles como la final de Wimbledon, del mismo modo la leyenda de Ayrton Senna no sería tan grande si no fuera porque enfrente tuvo a otro de los grandes, y gracias a ellos pudimos disfrutar algunos de los mejores momentos de la historia de la Fórmula 1.